BREVE HISTORIA DE CÁCERES-CASAS FUERTES (XXIV)
BREVE HISTORIA DE CÁCERES
SEGUNDA PARTE-VECINDARIO (XXIV)
Crónica desde la calle cuba de mi Llopis Ivorra
Son muchas las casonas, casas fuertes y palacios que se encuentran dentro de la ciudad murada de la villa cacerense, más, tambien quedan algunas por citar de las que se encuentran extramuros, incluso algunas no nombrados de las existentes intramuros como:
Casa de los Aldanas, ubicada en la cuesta que le da nombre, solar perteneciente al señorío de Lagartera, perteneciente a la casa de Fernán Núñez.
La casa primitiva de los Ulloa, ubicada en la plazoleta en el comienzo de la calle Ancha, solar de Sancho Sanchez de Ulloa, comendador de Castilnovo, este sería el primero de su linaje que asentó en Cáceres.
Otra casa de la familia Ulloa, tambien en la calle Ancha número 1, frente a la fachada de la iglesia de San Mateo.
Casa de los Paredes Saavedra, en el número 3 de la calle Ancha.
La de los Ovando Mogollón en la plazuela de Santa Ana.
La casa de los Espadero Pizarro, tambien en la calle Cuesta de Aldana, donde sus blasones revelan se casona del siglo XV, donde en su interior y en las escaleras, al doblar del primero al segundo tramo, y afianzado al barandal, se ve un mono labrado en piedra de granito de una magnifica perfección y realismo que se admira como prodigio del arte, y que por la gente del pueblo dio en llamarla Casa del Mono.
La casa de los Vargas, señores de Mayoralguillo, donde tenía su residencia el fundador del convento de Jesuitas, dando vuelta a la calleja de la Manga, pegada a la casa del Sol, donde estuvo alojada la comunidad de jesuitas, hasta que puedo finalizado su impresionante edificio.
La casa de los Rivera en el número 2 de la calleja de la Manga, en esta asa quedó constituido el colegio desde 1913 de la Santísima Trinidad, colegio fundado en testamento en 12 de noviembre de 1910 por su propietario Petra Fernández Trejo, en la actualidad sede de los Hermanos de la Cruz Blanca.
Casa de los Becerra, casa de los Comendadores de Ordenes Militares, en la cuesta de la Compañía, frente a la casa de los Jesuitas.
Otra que fuera casa principal de los Rivera, en la plaza de Caldederos, frene al Palacio de la Generala.
Casa del sol
La casa rectoral del curato de Santa Maria, al principiar la calle Cuesta de Aldana, o casa de los Moragas
Casa de Hernando de Ovando y Mencía de Ulloa, nombre por la que se conoció a la casona que se ubica junto al palacio episcopal, edificada a principios del siglo XVI por el que fuera hijo del Capitán Diego de Cáceres y Ovando, fachada de estilo plateresca, con escudos de Ovando y Ulloa.
Casa del Aire, fue más torre que casa, ya que en tiempos remotos fue torre defensiva árabe del siglo XII, que pasó a convertirse en viviendas de Hidalgos, que llenaron la fachada de escudos nobiliarios, pasando de familia en familia, hasta recaer en la de Ovando-Solís, hoy muy reformada es la sede de las Monjas Siervas de Maria.
Casa de las Culebras, o casa de la Culebra, ubicada en el número 13 de la calle Muchos Chaves, que fue casa primitiva de Alonso Espadero, fundador que fue de esta casa en el siglo XVI, y redificado en el siglo XIX.
Cuenta que el nombre le vino por un sucedido ocurrido en esta casa no cuando su estado era ya ruinoso e inhabilitado para vivir en ella, un grupo de titiriteros y domesticadores de fieras, y ocurrió que, al levantar el campo, echaron en falta dos serpientes que, buscaron y no encontraron, y en la creencia de que se escabulleron entre las ruinas del caserón allí quedaron, la gente empezó a llamarla Casa de las Culebras.
Más tambien hubo gente del pueblo de esa de mala lengua, que el nombre de culebras, era un apodo al que se refería la gente común, a las dos últimas propietarias de la casa doña Maria y doña Juan rojas Espadero, que fueron las que vendieron el solar a Carlos y Marcelino Godínez de Paz, de ser cierto este apodo se deduce la catadura de las dos hermanas.
Otra Casa de los Becerra, fue la que estaba en la calle Moreras número 2, casa fundada por Gregorio Becerra en el siglo XVIII, solar donde durante muchos años, quedo establecido el Casino de Artesanos, y que en los años de 1870 albergó un teatrillo.
En la corredera de San Juan número 5, casa de los Ovando-Tovar, que pasó a la casa de los Vizcondes de Albarranega, y otra señalada con el número 13 de la misma corredera, perteneciente a los Ovando-Sotomayor, reedificada en el siglo XVIII por los Porres, condes de Canilleros, hoy de los herederos del Marqués de CastroSerna.
La de Espadero-Saavedra, frente a la puerta llamada del sol de la iglesia de San Juan, que la heredaron del Marquesado de la Isla.
En la misma Plazuela posterior de San Juan, se encuentra la casa de Juan de Saavedra el Navarro, caballero que fuera en el siglo XV.
La casa de los Topetes, al final de la calle Donoso Cortes, en el número 21.
La de los Merino, casa sin importancia ninguna, pero se la nombra por estar en ella la torre Redonda, árabe y albarrana del siglo XII, llamada así, aunque es ochavada en su terminación.
Con esto damos por terminado el recorrido las casas fuertes y palacios menos conocidos, o menos nombrados, pero igual de históricos que el resto de los demás, han sido noventa y siete capítulos en los que he tratado resumir más de dos mil años de historia, para ello me he vasado en los trabajos de historiadores locales, como Don Antonio Floriano Cumbreño, don Publio Hurtado, don Miguel Muñoz de San Pedro y el Páter Simón Benito Boxoyo, y alguno más actuales, pero la historia es historia y no faltara quien la cuenta con nuevos datos y más actualizados.
Salud.
(Fuentes Floriano Cumbreño-Guía Cáceres)
(Fuente Publio Hurtado-Castillos)
(Fuente Muñoz SanPedro)
(Fuentes Simón Benito Boxoyo-Noticias)
Agustin Díaz Fernández