-CAPITAN DIEGO CÁCERES DE OVANDO 1475-1476 (XVI)

14.07.2020 11:19

                     HISTORIAS DE LA VILLA DE CÁCERES

                  CAPÌTÁN DIEGO DE CÁCERES OVANDO

                                   1475-1476 (XVI)

Paladín de los Reyes Católicos

Crónica desde la calle cuba de mi llopis Ivorra

En el capítulo anterior, quedaba el capitán don Diego en la tranquilidad de deja4r pasar el tiempo, hasta que el panorama se aclarara, en la fortaleza de Benquerencia , donde retuvo la alcaidía hasta que se cumpliera lo pactado, sin peligros de ataques y sin complicaciones, en la noche del 11 al 12 de diciembre, moría el Rey don Enrique IV y comenzaba el reinado de su hermana Isabel, casado con don Fernando de Aragón, hijo de su gran protector y amigo el rey don Juan de Aragón, don Diego solo esperaba el instante propicio para dar el salto al ámbito nacional.

                                   Fortaleza de Benquerencia 

Los problemas de la Orden de Alcántara, quedaban en lugar secundario, ante la sucesión a la corona castellana, doña Isabel había sido proclamada Reina en Segovia, pero doña Juana la “Beltraneja”, la supuesta hija del monarca difunto, andaba por Extremadura, llevada y traída por el Marques de Villena, hijo del que proclamo contra Enrique IV, los derechos del Infante don Alfonso y de la Infanta doña Isabel. Ya en vidas de aquel monarca, quisieron casar a doña Juana con el Rey de Portugal, Alfonso V, ahora renacía la idea, alentados por los grandes prelados, que más habían combatido precisamente los derechos de esta princesa.

El Marques de Villena, el Arzobispo de Toledo, don Alonso Carrillo, los Duques de Arévalo y varios más, que fueron los que alzaron por Rey  en Ávila al infante don Alfonso, y los que luego defendieron el derecho sucesorio de doña Isabel, basada tan solo con sus manejos ambiciosos, se habían trocado, en defensores de la Beltraneja, a la que ellos mismos deshonraron antes públicamente, difundiendo los rumores de no ser hija del Rey Enrique IV, a estas veleidades que  dieron escasos beneficios con anterioridad, no querían renunciar, en la espera de obtener nuevas ventajas , cuenta el cronista que : En esta división, se despertó la codicia, y creció la avaricia, cayo la justicia y señoreo la fuerza, reino la rapiña.  Si algo habían captado de la personalidad de don Fernando y doña Isabel, no llegaban a comprender que estos Reyes no serían tan fáciles ni tan sin peligro como los anteriores. De momento, la boda de doña Juana con el Monarca portugués les ofrecía grandes oportunidades a los integrantes, a los que solo los rencores y el medro personal les interesaban, sin preocuparles de los daños que pudieran traer la invasión extranjera.

En medio de tantas  amenazas  y tantas intrigas, el Capitán don Diego de Cáceres había elegido ya el camino a seguir, su puesto había decidido estaba junto a don Fernando y doña Isabel, a disposición de estos puso su alcaidía, correspondiendo a esta lealtad, el Monarca despacho Real Cedula en Valladolid el 2 de mayo de 1475 (Por cuanto vos el Capitán don Diego de Cáceres, mi vasallo, alcaide de Benquerencia, habéis hecho pleito y homenaje a mí y a la muy ilustre reina, mi muy amada y cara señora mujer por la fortaleza de Benquerencia, y de servirnos y de hacer  guerra o paz de ella por muestra mandato, por vos hacer bien y merced en enmienda a los muchos agradables servicios que al rey mi señor padre y a mi habéis hecho, os aseguro y prometo que por mi fe y palabra real, que os ayudare y defenderé y amparare contra todas las personas que mal o daño os quiera hacer).

               Fernado el Catolico

Don Diego, que había ido a Valladolid para besar las manos de los Reyes y ponerse a sus órdenes, supo que don Alfonso de Portugal, desentendiendo los prudentes los prudentes consejos de algunos de sus nobles, había decidido desposarse con su sobrina doña Juana la Beltraneja y entrar en los reinos castellanos por Extremadura, los monarcas de Castilla, no tenían fuerzas para oponer a la invasión, y para complicarlo más, en Extremadura , el Duque de Medina Sidonia y don Alfonso de Cárdenas, titulado Maestre de Santiago, contra el Conde de Feria. El Capitán don diego, regresó a Benquerencia en los comienzos de mayo, en Arronches, lugar fronterizo, próximo a Badajoz, Alfonso IV reunió su ejército, formado por más de cinco mil de a caballo y catorce mil infantes, mientras los que deberían defender las fronteras, se desangraban en las estériles referidas luchas.

En estos decisivos tiempos don diego de cácheres, destacó como uno de los pocos leales y como aquel en que los Monarcas de Castilla tenían puestas sus mayores esperanzas en lo relativo a Extremadura, por Real Cedula de 2 de mayo, le confirieron plena representación de los ámbitos regionales , tanto para el sometimiento de rebeldes  como para la recluta de gente, pudiendo disponer a tales fines de todas las rentas de la corona en Extremadura, la importancia del encargo, pone de manifiesto, el magno alcance de la confianza de los Monarcas castellanos en don diego de Cáceres Ovando, - mi vasallo, alcaide, y capitán de Benquerencia, Mí vasallo-consigna el rey-.-

Todo el territorio extremeño, con sus más representativos núcleos urbanos y con las dos poderosas ordenes arraigadas en él, quedaban por campo de las leales actividades del capitán don Diego, pero aun fue mas concreta la autoridad que recibió en la milicia alcantarina, huérfana de dirección, pese a ser tres los que se titulaban Maestres de la Orden, de estos tres don Alonso de Monroy seguía preso, don Juan de Zúñiga era un niño, y el nombramiento de don Francisco de Solís tenia muy poco de legal y de efectivo, pro además uno de ellos, Zúñiga , era enemigo de los Reyes y los otros dos no le inspiraban confianza, así las cosas, don Diego volvió a oficiar, por segunda vez funciones de Maestre, Una Real Cedula , dispuso que todos los priores, comendadores y caballeros de la  Orden , siguiesen y obedeciesen al leal cacerense..

Miguel Muñoz de Sampedro-Tres Paladines

                               Solar del Capitán Diego de Cáceres de Ovando

Agustin Díaz