CÁCERES ERMITA DEL VAQUERO I
HISTORIAS DE LA VILLA DE CÁCERES
ERMITA DEL VAQUERO (I)
Año de 1667
Crónica desde la calle Cuba de mi Llopois Ivorra
En la calle de Caleros de esta villa cacerense, está la iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe, llamada del Vaquero, por ser este lugar donde vivió el Vaquero Gil Cordero de Santa María Albornoz, es muy semejante a su original, y tanto que, si le acomodasen los vestidos y en formas de aquella, podrían darse al equivoco.
El sitio que ocupa esta iglesia, es el que tenia la casa en la que vivió Gil cordero, natural de Cáceres, cuando se le apareció Nuestra Señora de Guadalupe, parece, mandó fabricar esta imagen don Juan de Carvajal y Sande, Presidente de Hacienda, y concluida en 1667, se colocó, en 8 de septiembre de 1668, proveniente desde la parroquia de Santiago, que es de donde pertenece.
Su fabrica es de arreglada arquitectura, de una nave, un alatar en ella y otro en el camarín, este es de forma ochavada, con varias fajas y labores, como también la bóveda de la iglesia, tiene capellán y aunque su dotación fue muy suficiente, consistió en juros y no tiene cabimiento (tener lugar las rentas con las que había sido asignado).
Tiene ermitaño en casa contigua, al que señalo el fundador 1oo Ducados para el cuidado de la iglesia, su capellán hace celebrar por devoción su fiesta anual el 8 de septiembre.
Esa noble Villa de Cáceres, en 2 de Enero de 1612, acordó se comprase la casa que habitó el vaquero, o permutarse por otra cosa con su dueño, y se hiciese a devoción de Nuestra Señora de Guadalupe, un devoto humilladero en ella, en 6 de febrero del mismo año, el Corregidor hizo presente un memorial, dado por personas religiosas y de buena vida sobre que respecto haber acordado el Ayuntamiento, que en la casa en la que vivió el pastor al que se la apareció Nuestra Señora de Guadalupe (y revelo que fuese en procesión la clerecía de esta villa donde estaba, y se infiere y tiene por cosa cierta, que tiene por persona a quien tal merced le hacía, lo merecía su vida y costumbres, y que por ello era bien estimarle y a sus cosas) se derribase y se hiciere un humilladero de oración en memoria de la merced que Nuestra Señora hizo a esta Villa, acordándose de ella, pero sabiendo que no solo no se cumplía lo acordado, si no que habitaba la casa una mujer profana y de mala vida, pedían se llevase a efecto lo acordado, la villa mandó que los comisarios mandasen tasar las casas y derribarlas, no habiendo querido hacerlo su dueño, a quien se le pagase el importe ,dicho importe fue de 50 Ducados , que correspondían a Juan Duran, clérigo, que por ser de capellanías , se mandaron depositar hasta su empleo.
FABRICA DE LA IGLESIA
En 5 de Septiembre de 1622, viendo la villa que por defecto de caudales no se ponía en ejecución la fábrica de una muy decente capilla, nombraron comisarios para ello y para sacar dineros de donde los tuviese la villa, tanto de sus propios como de sus pares y quintos, tomando ,los arbitrios más oportunos para conseguir finalizar las obras, y en caso necesario, con la intervención del Corregidor, pidiesen limosnas a los Regidores, Nobleza, y demás personas devotas, al fin de que se concluyesen con toda autoridad.
Aunque no se admitía tratar este asunto, era cierto que la obra no se hacia y, en 29 de enero de 1660, don Juan de Carvajal, hizo presente que, respecto que esta villa, por la devoción que tenía a Nuestra Señora de Guadalupe, les principió a labrar una ermita en la calle de Caleros, y por las necesidades que había padecido, habían cesado tan santa obra, que el señor don Juan de Carvajal y Sande, del Consejo y Chamara de S,M., su tío reconociendo las muchas obligaciones que debía a Cáceres, como a madre, y por la devoción que tenia a la celestial señora, proseguiría la obra, teniendo el beneplácito de la villa, en vista de cuya propuesta repitiendo gracias al apunamiento, acordó dale el permiso que solicita para cuanto le fuese servido. La fabricas hasta entonces ejecutada por la villa, se había costeado con las penas de curtidores, molineros, casaca del puerto de Carmonita y cuarto de la casa de Mayoralgo.
SALIDAS DE NUESTRA SEÑORA DE GUADALUPE
Consta que, en 5 de noviembre de 1675, acordó la villa que el 12 de mismo mes se llevase esta imagen a Santa María, por los buenos temporales, que se celebrase procesión general, novenario y sermón y, en 5 de octubre de 1700, por grave enfermedad del Rey Carlos II, se acordó hacer igual procesión y novenario, conduciendo a Santa María la imagen en procesión.
(fuentes Simón Benito Boxoyo- Noticias Históricas de la villa 1794)
En la actualidad, es así conocida como ermita del Vaquero, la que en sus orígenes se llamó Nuestra Señora de Guadalupe, según documentos, parece que ya en 1612 se dieron los primeros pasos para levantar donde vivió el vaquero Gil Cordero, una ermita en reconocimiento de su especial figura. Tras varias tentativas llevadas a cabo, incluso por los propios vecinos de la calle de Caleros, lugar de ubicación de la mencionada vivienda, como por el Ayuntamiento y de no menos impedimento, es en el año de 1660 y por iniciativa de don Juan de Carvajal y Sande, quien entre otras muchas cosas, también era caballero de la orden de Calatrava, quien en el año de 1667 costeo la realización de la imagen de Santa María de Guadalupe, en el lugar exacto de donde vivió Gil Cordero, se edificó la ermita en la villa cacerense.
El 8 de septiembre de 1668 fue llevada procesionalmente la imagen de la virgen de Guadalupe desde la parroquia de Santiago, hasta la que seria su nueva casa, oficiando la primera misa por Gerónimo Iñigo Rubio, cura párroco de Santiago, el retablo es obra de Juan Bravo, natural de Brozas, el primer ermitaño fue Sebastián García y el primer patrono Gonzalo de Ulloa y Carvajal de la orden de Alcántara.
Al comienzo de la existencia de la ermita del Vaquero, surgen serios problemas entre la parroquia de Santiago y Santa María, por la propiedad de la ermita, resolviéndose a favor de Santiago.
El edificio, es de sillería y manposteria de una sola nave, divida en tres tramos y camarín, bóvedas de aristas son las cubiertas, cúpula semi esférica en el crucero y cañón con lunetos en la capilla mayor, apoyado en arcos de medio punto, sobre pilastras, coro alto, sencillo, de moderna construcción en el interior se guardan varios objetos de, lámparas, telas, objetos de plata, imágenes.
Hasta mediados del siglo XX, la fiesta de Nuestra Señora de Guadalupe en esta ermita, tenía una asistencia multitudinaria por parte de los cacerenses, mesa de ofrendas, platos típicos, así como bailes, juegos, pero todo pasó al olvido durante muchos años, hasta que en la década de los ochenta gracias a los vecinos de tan cacerense calle de Caleros, se arregló la ermita y contribuyen a que se mantenga vivo el recuerdo del Vaquero Gil Cordero de Santa María Albornoz.
(fuentes Corrales Gaitan)
Agustin Diaz.